viernes, 26 de octubre de 2012

Jack Bruce

Jack Bruce está en la Argentina. Gloria Guerrero lo entrevistó.

 “Amo reencontrarme con mis viejas canciones”

Aunque su fama se estableció durante sus años con Cream, el trío que compartía con Eric Clapton y Ginger Baker, el bajista hizo música con medio mundo, desde Frank Zappa y Lou Reed hasta Ringo Starr y Mick Taylor. “Yo no toco jazz, yo toco Jack”, afirma.

Por Gloria Guerrero

Jack Bruce no había salido aún de la adolescencia cuando ya tocaba con los pioneros del rhythm & blues inglés: Alexis Korner y Graham Bond. A poco de cumplir la mayoría de edad formaba Cream con Eric Clapton y Ginger Baker, el power trío que en lo poquísimo que duró –sólo tres años– vendió 16 millones de discos y terminó inventando una nueva manera de hacer música en serio. Desde entonces, el cantante, compositor y bajista escocés (también guitarrista, tecladista, armoniquista y chelista) ha conseguido una carrera brillante; trabajó con los instrumentistas más respetados y dejó –y sigue dejando– algunas de las canciones más recordadas de la historia. Y también algunas de las zapadas más intensas de la historia: “Sweet Wine”, del primer disco de Cream (Fresh Cream, 1966), cuya duración original era de 3,27 minutos, a lo largo de los años fue estirándose y estirándose hasta alcanzar versiones de 6,40... 7,17... 9,25... ¡y 14,12!, a puro vapor. Hoy muchos críticos prefieren dejar de lado la palabra “rock” y consideran a Bruce “un músico de jazz y blues”. ¿Pero a él qué le parece? “Yo no toco jazz, yo toco Jack”, se ríe el hombre que en mayo próximo cumplirá 70 y que dentro de pocas horas dará un concierto en el teatro Gran Rex de Buenos Aires. Resulta inexplicable, si se habla de un país que ha recibido a prácticamente todo bicho cantor que camine o se arrastre por el orbe, que sea ésta la primera vez que Bruce toca en la Argentina.
Se sabe que detrás de todo gran bajista hay un gran baterista, pero a la hora de preferir a algunos, a Bruce le cuesta: “No me gusta tener que elegir”, admite. “Pero tengo recuerdos maravillosos de cuando toqué con Tony Williams, y con Ringo Starr...” Bruce giró con la All-Starr Band entre 1997 y 2000; con Tony Williams (ya fallecido, ex baterista del gran Miles Davis cuando tenía sólo 17) compartió a comienzos de los ’70 el Tony Williams Lifetime, cuarteto que se completaba con John McLaughlin en guitarra y Larry Young en órgano. Luego de la disolución de Cream, y antes de Williams, Bruce había formado una banda con Larry Coryell y el ex baterista de Jimi Hendrix: Mitch Mitchell. Luego, y hasta ahora, ha seguido siendo el líder de sus propios grupos, que incluyeron valiosos instrumentistas como Mick Taylor, Billy Cobham, Simon Phillips, Carla Bley, David Sancious o Gary Moore. Su discografía propia es apabullante, al igual que sus trabajos en colaboración: entre otros, estuvo con Lou Reed (en Berlin) y Frank Zappa (juntos compusieron las canciones de Apostrophe). Pero cuando se le pide que elija a sus dos guitarristas preferidos, es escueto: “John McLaughlin y Eric Clapton”, dice. Pero hubo otros, claro.
–En 1981, usted editó dos trabajos junto con Robin Trower: B.L.T. y Truce. En 2008, más de un cuarto de siglo después, los temas de ambos discos fueron compilados en 7 Moons, más algunas canciones nuevas. ¿Cómo surgió la idea de este reencuentro y qué tan natural le resulta componer junto al “Hendrix blanco”? –Bueno, Robin quería reeditar nuestros primeros álbumes en CD y le sugerí que compusiéramos un par de temas nuevos. Siempre es un placer trabajar con grandes músicos, y Robin es uno de los artistas más honestos y dedicados que he conocido en toda mi vida; también es un placer tocar junto con el finísimo baterista que participó en 7 Moons, mi gran amigo Gary Husband. El proyecto surgió de un modo tan sencillo y tan natural que decidimos hacer el álbum completo. De paso, Robin muere por las tostaditas de queso que hace mi mujer, Margrit, así que eso terminó de sellar nuestro pacto y escribimos 7 Moons en mi propia casa.
–Hace un par de años, luego de la reunión de Led Zeppelin, las redes sociales y YouTube intentaron hacer un escándalo con una declaración suya: “Cream es una banda diez veces mejor que Led Zeppelin”, dicen que dijo. ¿Lo dijo? Más aún: ¿lo piensa? –No, no... Hice una pequeña broma acerca de Zep y la prensa lo convirtió en una bola de nieve. De hecho, Jimmy Page es un antiguo gran amigo mío, y en las viejas épocas solíamos tocar juntos todo el tiempo. Por cierto, Jimmy vino a mi más reciente concierto en Londres, sólo para saludarme.
–Y, además de admirarlo como guitarrista, ¿qué tal se lleva con Eric Clapton (“God”)? La mayoría cree que el título de su precioso álbum de 2003, More Jack Than God (Más Jack que Dios), es una cargada a Clapton, por aquel “divino apodo” de las épocas de Cream. –Se dijo eso, y es momento de aclararlo... El título More Jack Than God viene de una sesión para aquel disco, donde yo tocaba la guitarra acústica junto con el guitarrista Godfrey Townsend. El ingeniero de grabación quería definir los volúmenes relativos de las dos guitarras y me preguntó si yo prefería “Más Jack que God” (por Godfrey)... ¡y ahí supe que ya tenía el título!
–Cream se separó inesperadamente, en su mejor momento; ¡llegó a decirse que Ginger Baker lo corrió a usted con un cuchillo! El trío se ha reunido más de una vez, pero después de los conciertos de 2005 se lo citó declarando: “Cream se terminó”. ¿De verdad cree que se terminó? –Primero, lamento desmentir lo del cuchillo: eso nunca pasó... Cream se separó porque Eric y yo queríamos hacer cosas diferentes. En cuanto a si Cream se acabó, mire: teníamos planes para reunirnos en 2013, pero creo que Ginger dijo o hizo algo que puso furioso a Eric... ¡y entonces ahora no sé qué va a pasar!
–Por más que el público se lo siga pidiendo y no pueda evitarlo, ¿le da placer tocar canciones de Cream en sus shows? –Me encanta hacer algunos de mis viejos temas. Son como mis hijos: ya tienen sus propias vidas en el mundo, pero me gusta encontrarme con ellos y saludarlos, una y otra vez.
–¿Qué música viene escuchando estos días? –Ah, Louis Armstrong Hot Five, el trío folk escocés Lau, Radiohead, Blind Willie Johnson, Nusrat Fateh Ali Khan, el nuevo álbum de Bobby Dylan: Tempest, Astor Piazzolla, las sonatas de piano de Prokofiev y Nikolai Kapuskin.
–La banda que lo acompaña en esta visita (His Big Blues Band) está formada por siete músicos muy jóvenes. ¿Cómo los eligió? –Yo no los elegí, ellos me eligieron a mí, y el destino nos juntó. Son los músicos más maravillosos de la nueva generación inglesa y los adoro. Y me parece que ustedes los van a adorar también.

 Pagina12

No hay comentarios:

Publicar un comentario